martes, 27 de abril de 2010

LOS 120 DÍAS DE SODOMA / SALÓ (Pier Paolo Pasolini, 1975)






































LOS 120 DÍAS DE SODOMA / SALÓ

AÑO: 1975
PAÍS: ITALIA
DIRECCIÓN: PIER PAOLO PASOLINI
PRODUCCIÓN: ALBERTO DE STEFANIS, ANTONIO GIRASANTE, ALBERTO GRIMALDI
PROTAGONISTAS: ALDO VALLETTI, GIORGIO CATALDI, PAOLO BONACELLI, UMBERTO PAOLO QUINTAVALLE


ARGUMENTO:

Basada en la novela del Marqués de Sade (1785) y ambientada en la Italia post-II Guerra Mundial (República de Saló) durante la ocupación neofascista, relata las andanzas de cuatro hombres poderosos que se encierran durante 120 días en un castillo con varios jóvenes raptados a diversas familias para dar rienda suelta a sus más extremas prácticas sexuales. Todo ello, con la ayuda de hombres armados y de cuatro maduras prostitutas que, para mantener candente el clima de degeneración sexual, son las encargadas de contar historias con toda clase de transgresiones…


COMENTARIO:

Dividida en cuatro capítulos: ANTEINFIERNO, CÍRCULO DE LAS MANIAS, CÍRCULO DE LA MIERDA, CÍRCULO DE LA SANGRE, este filme de Pier Paolo Pasolini, poeta, escritor y cineasta, vino a coronar una carrera llena de un discurso liberador en contra del sistema italiano estructurado y hostigador, donde el poder era la base sobre la cual se levantaban las represiones hacia la clase trabajadora.

Creador sin par, autor de piezas tan soberbias como inquietantes, entre las que sobresalen: EL EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO (1964), PAJARITOS Y PAJARRACOS (1966), TEOREMA (1968), POCILGA (1969) y su trilogía de la vida EL DECAMERÓN (1971), LOS CUENTOS DE CANTERBURY (1972) y LAS MIL Y UNA NOCHES (1974), con ellas levantó toda clase de polémicas por su propuesta contestataria y siempre en oposición a las fuerzas políticas establecidas y al clero.

Y llegamos a 1975… fue ahí cuando Pasolini tomó la novela del Marqués de Sade LOS 120 DÍAS DE SODOMA y la adaptó a la realidad local, ambientándola en la Segunda Guerra Mundial y en el clima beligerante que se respiraba por ese entonces… fue así como tomó las figuras del PRESIDENTE (poder político), el DUQUE (poder real), el OBISPO (poder eclesiástico) y el MAGISTRADO (poder judicial), protagonistas principales, para simbolizar en ellos a los cuatro pilares en los que descansa el mundo… claro que la cosa no fue nada de fácil, Pasolini lineó una película que fuera la reproducción más fiel de la esencia de la novela del marqués, donde el universo de transgresiones sexuales aberrantes y el clima de degeneración fuera extremo y chocante… y a todas luces lo logró y con creces…

Desde su estreno, SALÓ a levantado pasiones en pro y en contra… algunos la defienden aduciendo que es una obra de arte simbólica que pretende develar los vicios y las corrupciones de una sociedad inhumana y sádica… otros en cambio, no ven en ella más que una cinta hecha para molestar, para exhibir comportamientos sexuales enfermos, utilizando para eso a menores de edad… situación que todavía hoy levanta polvareda…

Amigos de FANTASMATADERO, su servidor siempre abierto al cine más potente y con clara vocación social de terror, es uno de los cultores de esta obra, por el solo hecho de atreverse e ir más allá de lo que era hasta ese entonces el cine convencional y alternativo… Pasolini se manda una pieza magistral, orgásmica, llena de energía magra pero con un hálito de amor a la vida tremendo… a pesar de lo fuerte que pueda resultar toda la película, con una duración de dos horas difíciles de soportar, siento que es un largometraje que hay que vivir y que se constituye por si solo en un hito dentro de la cinematografía universal…

Sin duda está dentro de mis favoritas a muerte, ya que el desfile de las escenas opresivas, escabrosas, violentas, torturantes, adornadas por una banda sonora de lujo (compuesta por el mismísimo Ennio Morricone), por una fotografía de nivel (responsabilidad de Tonino Delli Collli), actuaciones para la historia y un remate narrativo que nunca decae, hacen de SALÓ una experiencia absolutamente recomendable pero con la advertencia de que no es para todos los gustos (o mejor dicho para los buenos gustos)… porque aquí somos testigos privilegiados de coprofagia, homosexualidad, violaciones, torturas, vejaciones, locura agresiva, abuso de poder, indolencia, sadismo, desequilibrios… en fin, podría estar una vida escribiendo todo lo que se ve pero la idea no es sólo quedarse con eso, sino que observar detenidamente lo que pasa bajo la superficie… allí encontraremos una profunda crítica social a las llamadas instituciones pilares que son las que, en definitiva, dictan las pautas estructurales para la humanidad, con sus desigualdades, violencia y abusos… vale decir, SALÓ es una especie de personificación de ese sistema llevado al borde de la racionalidad…

Después de su estreno, Pasolini fue asesinado en circunstancias que hasta hoy no tienen respuesta clara y satisfactoria, oficialmente se dijo que fue un ajuste de cuentas por su homosexualidad, pero también, con los años, se ha abierto la brecha en relación a una especie de complot de autoridades muy influyentes que veían en el realizador italiano a un arma muy peligrosa debido a su ascendencia intelectual y al status cinematográfico adquirido… sin duda, para darle más de una vuelta…

En fin, SALÓ es una obra que deben ver, es más que recomendable, es una obligación deliciosa para todos los que se consideren seguidores o cultores del cine en general y del fantástico en particular, ya que en su desarrollo la historia llega a alcanzar ribetes surrealistas dentro del campo de la transgresión…

TODO LO QUE DIGA ES POCO… PASOLINI ES ANTE TODO UN PENSADOR CONSECUENTE Y LIBERADOR…