jueves, 17 de junio de 2010

LA TETA Y LA LUNA (Bigas Luna, 1994)

















LA TETA Y LA LUNA


AÑO: 1994
PAÍS: ESPAÑA
DIRECCIÓN: BIGAS LUNA
PRODUCCIÓN: ANDRÉS VICENTE GÓMEZ
PROTAGONISTAS: BIEL DURÁN, MATHILDA MAY, GÉRARD DARMON, ABEL FOLK, MIGUEL POVEDA


ARGUMENTO:

Tete es un niño de unos ocho años cuya existencia ha cambiado desde el nacimiento de su hermanito… como es de esperar, la atención de los padres se ha desviado hacia él, lo que ha generado en Tete una premisa muy importante: “debo buscarme una teta para mi solo”… es así como sumido en un mundo de fantasía e inocencia, el pequeño inicia esta particular búsqueda que lo llevará a conocer a Estrellita, una bailarina francesa fetichista que ha llegado con su esposo, un pedomante (hace de sus pedos un arte), para mostrar su espectáculo en el pueblo, lo que altera los desvaríos de Tete y de su amigo Miguel, quien se enamora perdidamente de aquella mujer…
Es así como el mundo onírico que se le abre ante sus ojos será el camino que tomará para alcanzar su objetivo y de esta manera demostrarles a sus padres lo valioso que es…


COMENTARIO:

Bigas Luna es un controvertido director español que ha tenido una carrera muy zigzagueante, ya que ha dado a luz cintas particularmente mediocres y, como contraparte, obras muy poéticas y sensuales… como es el caso de LA TETA Y LA LUNA…

Esta cinta se conoce como el cierre de la trilogía erótico-nacionalista que comenzó con JAMÓN, JAMÓN, le siguió con HUEVOS DE ORO y finalizó con este largo, que cuenta la historia de Tete, un niñito que se revela en contra del “nuevo orden” que se establece dentro de su familia, cuando nace su hermanito… un bebé al que ve como chanchito y al que desprecia por cuanto “se toma toda la leche de mamá y la deja vacía”, es entonces cuando su padre debe “llenarla nuevamente”…

Toda esta fantasía e inocencia surrealista hace del mundo de Tete una experiencia evocadora, deliciosa, llena de alegría y que hace volver a los momentos simples pero esenciales de la vida… yo la vi hace ya muchos años, pero quise volver a disfrutarla para subirla al blog, por cuanto a pesar de no ser una obra de terror, sí es una película fantástica y muy sentimental…

Las aventuras de Tete por encontrar una teta para el solo, lo lleva a conocer a Estrellita, una dulce y fetichista bailarina de un espectáculo ambulante, que se convierte en su obsesión y también en la de Miguel, su amigo, el que se enamora de tan atractiva mujer…
La peli tiene mucha ternura, humor, sensualidad, evocación y personajes humildes y entrañables… amigos, un verdadero compendio de sensaciones que hacen regresar a la infancia, ese trozo de tiempo en el que lo único que importaba era en volar… ¡que tiempos aquellos!... ¿por qué será que con los años la mayoría de las personas se vuelven tan estúpidamente cerebrales?... olvidando la energía mágica y el juego de emociones a flor de piel que siembra esa etapa tan maravillosa de la vida…

Yo me la pasé A FULL con esta cinta y la recomiendo como el niño que fui y que soy… porque de algún modo, siento que ese Tete de hace muchos años sigue viviendo en mi y me sigue haciendo disfrutar de las cosas sencillas, esas que no demandan tantos rollos que lamentablemente terminan por desnudar inestabilidades emocionales muy marcadas en los adultos…

No voy a desmenuzar el filme porque merece la pena gozarse de principio a fin… pero les diré que contiene escenas muy graciosas, en las cuales me reflejé al 100 y que me inyectaron de energía pura, situación que agradezco de corazón…

Quizá y para hacer honor a la verdad… yo también ande en busca de mi propia teta… de mi propia vertiente de fuerza y vida… del universo en el cual jugar y amar… ese fue mi punto de conexión… aunque para ser honesto, hoy en día, el final de la película me refleja aun más con Tete y su destino…

Ah! la música de Nicola Piovani es genial!!!!

PURA MAGÍA…